Las mujeres que amamantan sufren menos enfermedades cardiovasculares

En el siguiente artículo hablaremos de una revisión sistemática y meta-análisis, revisado por la American Heart Association y publicado en su revista JAHA ( Journal of the American Association) el pasado 18 de Enero de 2022.

La lactancia materna se asocia con un menor riesgo cardiovascular materno:
Revisión sistemática y metanálisis que incluye datos de 8 estudios y 1 192 700 mujeres (ahajournals.org).

Este meta-análisis que se basa en 8 estudios ya publicados, confirma el menor riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares, enfermedades coronarias, accidentes cerebrovasculares y enfermedades cardiovasculares fatales, en mujeres que amamantan, con respecto a las que nunca han amamantado.

Este meta-análisis se trata de una revisión sin precedentes. Ya que incluyen datos de más de
un millón de mujeres (1192700). Los años de referencia para el estudio están entre 1986 y 2009. La edad media fue de 51,3 años en el momento del ingreso al estudio y de 24,6 años en el primer nacimiento. Con un promedio de 2.3 nacimientos.

De las mujeres participantes, el 82% informaron haber amamantado alguna vez. La duración media de de la lactanciamaterna fue de 15,6 meses. Durante 10.3 años de duración del seguimiento.

Esta revisión ha sido decisiva para señalar una vez más, de qué manera la lactancia materna
puede influir de manera positiva en la salud no solo del bebé amamantado, sino de la propia
madre.

Pero, ¿De qué manera puede influir el amamantamiento, en la reducción de este tipo de enfermedades cardiovasculares?

Existen diferentes teorías al respecto. En una de ellas se sugiere que la prolactina y la oxitocina, hormonas que intervienen en la lactancia materna. Sobre todo en el caso de la oxitocina, reduce el riesgo de padecer presión arterial elevada. Además de ser vasodilatadora y tener acciones antidiabéticas y antioxidantes.

Otra de las teorías recoge que la pérdida de peso que sufren muchas mujeres tras el parto,
es facilitada por la lactancia materna. Por tanto la disminución de grasa, ayudaría a disminuir el
riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares.
Algunos investigadores sugieren en este ámbito, que la lactancia materna pudiera
restablecer el metabolismo materno, entre los que encontramos alteraciones como la diabetes.
Además ya encontramos estudios que relacionan la lactancia materna y el menor riesgo de
sufrir hipertensión así como estudios que relacionan la lactancia con el menos riesgo de que una diabetes gestacional se establezaca como diabetes tipo 2.

¿Cuáles son las conclusiones de estos estudios?

Se ha constatado tras la revisión de los diferentes estudios la reducción progresiva del riesgo de padecer estas enfermedades y accidentes vasculares, en lactancias hasta los 12 meses.

Entre estos estudios, también podemos encontrar los que recogen la relación entre la lactancia
materna durante al menos 3 meses y el bajo riesgo de calcificación aórtica o coronaria.

En el caso de lactancias más allá de los 12 meses, se carecen de datos suficientes para un
estudio más a fondo. Esto podría explicarse si tenemos en cuenta las recomendaciones de la
OMS, con respecto a la lactancia materna exclusiva durante los primeros 6 meses. Al existir un
aumento en la ingesta de otros alimentos, se iría reduciendo la toma de leche materna, lo que podría explicar por qué es durante los primeros meses donde existen datos relevantes.

Además, también influye que el número de hijos se ha visto disminuido significativamente en los
últimos años. Entre 1950 y 2019, la tasa de fecundidad mundial disminuyó de 4,97 a 2,31. Así que,
sabiendo que las mujeres que han tenido más hijos, tienden a amamantar durante más tiempo, podría ser otro de los motivos que explicaría por qué no hay más datos de cómo desciende el
riesgo de padecer cardiopatías coronarias, más allá de los 12 meses. Aún así algunos estudios,
reflejaron una relación entre la duración de la lactancia materna, y el riesgo cardiovascular. Por
cada 6 meses adicionales de lactancia materna, el riesgo disminuye hasta en un 4 %.
Durante mucho tiempo se ha obviado la relación entre la lactancia materna y el bajo riesgo
cardiovascular. Llevandose a cabo el primer estudio sobre esto, en 2008. A partir de entonces
se llevaron a cabo diferentes investigaciones al respecto.

Las conclusiones de esta revisión, recogen los siguientes datos:

• Un 11% de menor riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares con respecto a
  las mujeres que nunca amamantaron.
• Un 14% de menor riesgo de padecer una enfermedad coronaria
• Un 12% menor de sufrir un accidente cerebrovascular
• Un 17% de menor riesgo de morir por una enfermedad cardiovascular
  Añadimos las enfermedades y accidentes cardiovasculares o coronarios a la lista de las
  diferentes enfermedades, en las que amamantar ha reducido el riesgo, como lo son el cáncer
  de mama, endometrio,carcinoma de ovarios, diabetes tipo 2, hipertensión, tiroides y artritis
  reumatoide,entre otras.

Podríamos concluir recogiendo la importancia de seguir trabajando en la información y
concienciación sobre las recomendaciones de la OMS en cuanto a la lactancia materna. Para
ello existe la necesidad de que las mujeres reciban apoyo antes y después del nacimiento de
sus hijos/as. Así como la importancia de un entorno laboral favorable.

Las mujeres necesitan saber los efectos positivos de la lactancia materna en su salud. No
solo en la salud de sus bebés.

Deben aplicarse diferentes intervenciones que promuevan y faciliten la lactancia materna, por lo que es muy importante que los profesionales sanitarios estén formados en lactancia para poder acompañar adecuadamente a estas mujeres.